Clack, clack, clack.

Buenos días, inspiración. Hacía mucho que no te veía. ¿Todo bien? Por aquí han pasado muchas cosas, unas buenas, otras no tanto. Pasa, pasa. Ponte cómoda. No estoy muy segura de por dónde empezar. Hace tanto tiempo que no venías, que había dado por hecho que jamás regresarías. ¿Te apetece un café? ¿Un refresco, mejor? Tengo muchas cosas que contarte. Pero bueno, empecemos por el principio...