Not sorry.

Adoro comer tacos, el tono de piel de los senegaleses y la cultura oriental; pero jamás respetaré a alguien que no se respeta a sí mismo. El respeto hacia uno mismo es vital. Si uno no se respeta, ha perdido la mayor de las batallas, porque como dijo Víctor Hugo: "El sufrir merece respeto, el someterse es despreciable".